Este proyecto beneficia a 21 socios de manera directa e indirectamente a todas las personas vinculadas a la producción y entrega de mortiño, así también en el transporte y la comercialización del vino, lo que permite una dinamización de la economía en la comunidad de Quinticusig, cabe destacar que el aporte de la Prefectura ha sido también en la promoción del producto en las diferentes ferias de iniciativas locales que organiza la Institución, a través de la Dirección de Fomento Productivo.
Luis Lutuala miembro de la asociación, destacó el apoyo brindado por parte de la Prefectura de Cotopaxi, indicando que ha sido fundamental el haber recibido el asesoramiento técnico, la construcción de la planta física y ahora con los recursos económicos para la adquisición de los equipos, asunto que ha fortalecido a la organización para su consolidación y desarrollo micro-empresarial.
Otra de las estrategias para el éxito de esta iniciativa local, es el haber firmado un convenio para la entrega del mortiño, con 5 comunidades aledañas a Quinticusig como son: Chugchilán, Isinliví, Guantualó, Panateo y Saquisilí, con el fin de abastecer permanentemente la materia prima y poder elaborar el vino, el mismo que cuenta con todos los permisos para el funcionamiento de la fábrica y los respectivos registros sanitarios, que garantizan la excelente calidad del producto.
La meta es continuar produciendo un exquisito vino de mortiño y colocar nuestro producto en perchas de los grandes centros comerciales nacionales e internacionales, ya que al momento estamos entregando a varios supermercados de Latacunga, Quito, Ambato, Riobamba, Guayaquil e inclusive, iniciamos a establecer contactos para distribuir en mercados internacionales, dado la extraordinaria calidad de nuestro producto, que deleita el paladar de quienes tienen la suerte de probar nuestro vino.