El Ing. Luis Cerda, técnico de DIEGA, explicó que la temporada invernal es la época precisa para ejecutar este tipo de proyectos en diferentes páramos de la provincia, “las lluvias ayudan a crecer las plantas” recalcó.
Cabe destacar que la forestación y reforestación tiene la finalidad de proteger los colchones y ojos de agua, en esta actividad participaron los integrantes del Gobierno Parroquial de Chucghilán, alumnos y docentes del colegio de Bachillerato San José De Flores. Las comunidades beneficiadas fueron Samanta, Amauta y Turumba ubicadas a más de 3.200 msnm.
Cerda explicó que la frontera agrícola ha rebasado los límites en los páramos, ante lo cual se debe concienciar a campesinos peros sobre todo a los jóvenes sobre el cuidado del ambiente, para conservar el ecosistema y las fuentes hídricas que se ha destruido por intervención del hombre.
Inés Toapanta, profesora de Colegio Bachillerato San José de Flores, manifestó que tanto las autoridades como las comunidades deben pensar en el futuro de nuestros hijos, “sin agua no se puede vivir” resaltó al tiempo que dio a conocer que en la institución a la que representa están realizando el campo de acción con temas ambientales.
Por su parte, Aurelio Pastuña, presidente de Gobierno Parroquial de Chugchilán, mencionó que es necesario reforestar todos los páramos del cantón y provincia, las plantas que entregaron fueron: arrayán, aliso, pumamaqui, tilo y azar.
