En el desfile participaron niños, jóvenes y adultos de los 24 barrios y comunidades perteneciente a la parroquia Belisario Quevedo como muestra de respeto, admiración y veneración, con alegría, entre música y danza gritaban a viva voz los loeros.
Mario Ataballo, Presidente del GAD Municipal, agradeció a los turistas y habitantes por colaborar para que estas fiestas se hayan desarrollado con alegría, emoción y sobre todo con respeto a su patrono.