Este programa se cumple el último viernes de cada mes en los siete cantones de la provincia de manera alternada en coordinación con los Gobiernos Cantonales y Parroquiales en beneficio de los sectores más vulnerables de la provincia.
Detrás de este gesto solidario se halla una gran tarea de los voluntarios y voluntarias de la institución tanto en la elaboración del chocolate como en la adquisición de los ingredientes para su preparación y finalmente el trasladarse desde la madrugada a los diferentes sitios de cada uno de los cantones para repartir el primer alimento del día a miles de cotopaxenses que por su situación económica no acceden a la alimentación en sus hogares.